
Si te sientes presionada e insatisfecha con tus decisiones, puedes intentar cambiar tu actitud hacia la vida. Para ello, puedes comenzar con la vieja pregunta, ¿Cómo está tu vaso, medio lleno o medio vacío? Responder esto te demuestra si necesitas más pensamiento en positivo para tu vida.
Está simple pregunta puede mostrar que tan positivo o negativo eres con respecto a las pruebas que te ha tocado vivir. Tu forma de pensar refleja tu visión de vida, el cómo te ves y cuánto te valoras. Si tomas consciencia de lo que estás pensando, puedes mostrar que tan pesimista o por el contrario qué tan optimista eres
Si deseas mejorar este aspecto de tí, debes seguir estos 8 pasos y notarás una importante diferencia.
Presta atención a tu pensamiento y observa cómo influye en tus emociones.

Es normal que no cuestionemos ni prestemos atención a nuestros pensamientos. Sin embargo, es importante que aprendas a detectar una cadena de pensamiento poco sana. En momentos determinados tus pensamientos influyen en lo que sientes, si te afectan, debes cuestionarlos.
El pensamiento positivo ayuda a controlar el estrés, además, es útil para mejorar tu salud. Si sientes que esto no sucede, tienes la opción de optar por un cambio.
Piensa en una posible situación donde algo te ha salido mal. Si eres una persona pesimista, concluirás que se debe a que:
- «No vales la pena».
- «Todo lo que haces está mal».
- «No sabes hacer nada bien».
Si te detienes a cuestionar lo que estás pensando, ya habrás dado un paso importante. Pregúntate si en realidad todo lo haces mal, si verdaderamente no sabes hacer nada y responde que todo esto son solo pensamientos negativos.
Identifica los pensamientos negativos

Uno de los pasos más importantes para cultivar un pensamiento positivo es identificar lo negativo que pueden ser algunos pensamientos. Si no sabes si tus diálogos internos son positivos o negativos, presta atención a los siguientes casos donde tu mente puede jugarte una mala pasada:
- Tiendes a ser dramática: de forma natural anticipas las peores situaciones sin tener idea de lo que pasará. Por ejemplo, si por la mañana te doblas el pie al salir de tu casa, piensas que el resto del día será un desastre.
- Culpas a otras personas por tus acciones: evitas hacerte responsable de tus pensamientos y emociones. Culpas a otras personas por situaciones que tú misma creas, con tal de no hacerte responsable.
- Exageras todo: conviertes un problema menor en una verdadera catástrofe.
- Tienes estándares muy altos: quieres que todo sea tan perfecto que se vuelve algo imposible de lograr, predisponiendo el fracaso.
Si tus pensamientos son negativos no te preocupes, puedes aprender a cambiar tu forma de pensar.
Céntrate en los pensamientos positivos

El tercer paso es dejar de lado las ideas que te hagan daño y centrarte en lo positivo. Este requiere más atención y práctica. Enseña a tu cerebro a escoger siempre la información positiva y preferirla a el pensamiento que te hunde emocionalmente.
Es posible que en situaciones difíciles este paso sea un reto, pero adquirirlo es de mucha ayuda. Pensar y anotar tres o más situaciones donde todo haya salido bien durante el día te puede resultar muy útil. Usa estos apuntes como un diario, en momentos duros consúltalo, esto te ayudará a centrar tu atención en cosas positivas de cada día.
Que tengas pensamientos positivos no significa que no veas lo negativo. Trata de enfrentar las situaciones desde un punto de vista positivo, con la certeza de que se podrán solucionar.
Aprende a agradecer y a perdonar

Existen estudios que confirman que agradecer hace que las personas sientan menos estrés, mejore su humor y disminuya la ansiedad. Por esta razón, agradece por tu salud, por las personas que te importan, por tu bienestar. Agradecer impulsa a tu mente a cambiar el enfoque de una situación.
El hecho de dar gracias hace que nuestra mente de forma casi automática cambie nuestro enfoque sobre la situación. Aunque probablemente no lo parezca, habituarse a agradecer es muy importante. Siempre encontrarás alguna razón por la cual dar gracias, y si crees que no la encuentras, búscala, ahí está.
Por otro lado, aprende a perdonar, esta acción facilita la creación de pensamiento positivo. De lo contrario se crearán pensamientos negativos, de dolor y de resentimiento.
Permítete reír y rodéate de personas alegres

No olvides el sentido del humor en situaciones difíciles, sonreír es una terapia sencilla que ayuda a mantenerte menos estresada. Asimismo, debes ver el lado gracioso y positivo a las situaciones que no podemos controlar.
Por otro lado, busca que tus amigos cercanos te den bienestar emocional. Las personas con pensamiento positivo te darán consejos útiles. Además, si llegas hacer un comentario negativo seguramente te harán caer en cuenta y podrás corregirlo.
Procura alejarte de las personas negativas. Este tipo de personas te ayudan a aumentar tu estrés y hacen dudar de tus capacidades para enfrentar situaciones arduas.
Crea afirmaciones positivas y repitelas cada día

Es una realidad que los problemas aparecen muchas veces en la vida. Relájate y acéptalo, por qué así como vienen se van, solo debes tener la confianza de ser capaz de solucionarlos.
Cuida la manera en que te hablas, el pensamiento que se convierte en palabra tiene un poder increíble en tu subconsciente. Utiliza afirmaciones como quiero o puedo, crea tus propias oraciones y repitelas diariamente.
Las afirmaciones funcionan. Crea el hábito de realizar afirmaciones positivas como:
- «Soy cada vez mejor en mi trabajo»
- «Soy como deseo ser»
- «Puedo cumplir con mis hábitos de forma exitosa»
- «Quiero y puedo avanzar hacia mis metas de manera eficaz»
Asimismo, un ejercicio que puede ayudarte es sentarte cómodamente, cerrar tus ojos y visualizar cómo deseas que sea tu entorno y qué harás para lograrlo. Finalmente, practica tus pensamientos para crecer espiritualmente como persona.
Con estos pasos obtendrás un método para tener una vida con mayor satisfacción y tranquilidad. No olvides que todos los cambios se originan en tí y tus actitudes acerca de tu vida. Si quieres saber más, escucha nuestro podcast sobre cómo mejorar su vida.